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Ficha de Raiden
Vie Ago 26, 2011 1:23 am
-Nombre: Raiden Daihenkaku
-Alías:
-Sexo: Masculino
-Edad: 25
-Raza: Humano
*Agilidad X2: La agilidad del personaje es superior a la de cualquier persona normal, pudiendo moverse en diferentes terrenos con gran facilidad.
*Experto en X Arma concreta (Katanas): Tú personaje se ha entrenado con un arma en concreto sacando el máximo provecho posible a esta.
Mide 1,78 y pesa 67kg; cabello negro azabache, medianamente largo, liso y nunca arreglado, cayéndole usualmente algunos mechones en el rostro. Ojos negros y opacos. De complexión delgada, con su espalda cubierta de cicatrices de heridas debido a azotes de látigos y fustas. Viste con una chaqueta de color negro debajo de una gabardina del mismo color que le llega hasta las rodillas, usualmente con las mangas recogidas. También suele llevar un par de guantes negros cortos, que no cubren los dedos sino solo la palma y el dorso, además de botas militares de cuero y un pantalón color beige. También lleva un cinto de tela medianamente ajustado, en el cual lleva su katana. Tal cinto le permite flexibilidad a la hora de desenvainar.
Relajado, no suele estresarse demasiado con casi nada, ya que considera que todos los problemas tienen alguna solución. Su hobby es caminar, teniendo como costumbre el pasear por las calles de las ciudades que visita, observando a sus habitantes, la mayoría con vidas pacíficas, que aunque tengan ideales y piensen formas de una vida mejor, no se atreven a realizar acciones consecuentes a ello. No le gusta discutir, ya que piensa que si alguien tiene una idea, esa idea es igual de válida que todas las demás, al no existir una verdad absoluta en aspectos sociales. Repudia la forma de mandato del Gorosei y del Gobierno Mundial, considerando que no son distintos al resto de la población, y que por ello, su mandato no puede ser legítimo. No tiene reparos en acabar con la vida de alguien, aunque suele decir un breve rezo cuando lo hace, ya que no se regocija de ello. Tiene un profundo respeto hacia los ideales de la revolución, y a sus miembros, teniéndolos a todos en alta estima, aunque por su personalidad suela rechazar los trabajos que le son asignados si no considera que valgan la pena. Tiene un apego hacia los cigarros, no como adicción, sino como relajante, fumando uno cuando no se encuentra haciendo nada más interesante. Además, su gusto más peculiar, es la pizza, la cual nunca rechazaría. Cuando lo desea, tiene unos modales impecables, además de un refinado gusto a la hora de catar té, debido a su tiempo en el Reino de Goa.
En cuanto a combates, suele tomarlos de la misma forma que su actitud común: Relajado. Se basa en ataques sencillos con una sola mano sosteniendo su katana, sin aplicar ningún estilo concreto o a veces esgrima, además de mezclarlo con golpes cuerpo a cuerpo. Sin embargo, a la hora de enfrentarse a otro espadachín o usuario de espadas, se lo toma más en serio, utilizando ya movimientos marciales avanzados, agarrando su arma con ambas manos, y su rostro denotando seriedad.
El asesinato de los cinco miembros del Gorōsei, y el derrocamiento del mandato del Gobierno Mundial, para dar paso a una democracia participativa.
No posee recuerdos particulares de dónde y cómo nació, ni de sus padres, ni de su infancia. El recuerdo más antiguo que posee es de su estadía como esclavo obrero en la construcción del puente transmarítimo, Tequila Wolf. Tal recuerdo, es cuando conoció a una persona que posteriormente sería su compañero y amigo, y que en ese momento, también era un esclavo más, aunque, cada uno le dio el nombre al otro, recibiendo él el nombre de Raiden. No contaría con más de 10 años para ese momento, y ya estaba curtido por el tiempo, teniendo una personalidad vacía, tan solo relacionándose con su compañero, y evitando lo posible el llamar la atención. Sin embargo, su cuerpo era débil, enfermándose continuamente, y siendo castigado brutalmente por ello, lo cual dejó imborrables cicatrices en su cuerpo y espíritu. En ese momento, no veía otro estilo de vida que el que llevaba como constructor en ese puente, hasta el día de una breve revuelta que aconteció en el lugar, llevada a cabo por la Armada Revolucionaria. En tal revuelta, Radien se encontró en medio de un tiroteo entre la marina y los revolucionarios, cayendo una bala de cañón cerca del infante, el cual cayó inconsciente. La batalla continuó con él sin enterarse de nada, aunque al final, los revolucionarios fueron forzados a escapar, sin embargo, llevaron a un contado grupo de esclavos consigo, para libertarlos. El pelinegro estaba entre ellos, sin embargo, un barco de la marina interceptó al navío en el cual se desplazaban, siendo este último destrozado. El chico tuvo la suerte de quedar náufrago sobre uno de los escombros del barco.
Cuando despertó, se encontraba en una casa que no sabía cómo describir, acostado en una cama. Las mantas eran completamente limpias, todo el lugar estaba iluminado, y una cosa que le maravilló, fue que en casi todos lados, se encontraba un libro. Vagó por la lujosa vivienda hasta que encontró al dueño, un hombre de unos 50 años, que se encontraba leyendo uno de tantos textos que había en el sitio. Le fue explicado que él, Alastor Thompson, le había encontrado en alta mar en una de sus excursiones de pesca, y que en ese mismo instante, se encontraban en el Reino de Goa, un lugar controlado por una familia del gobierno mundial, y dentro de ella, habitaban varios nobles. Thompson, admitiendo ser un excéntrico, le dijo que le rescató por curiosidad, aunque se comprometió a educarle, deseando ver el resultado que daría al final. A Raiden le costó adaptarse a una vida donde no tenía que realizar todo por su propia cuenta, y a no tener que preocuparse por todo lo que le rodeaba. Durante los años, fue educado con los mejores profesores de Goa, llevando el nombre de Raiden Thompson, desde matemáticos hasta filósofos, y también, instruido por una serie de maestros de esgrima. Thompson por su parte, también cuidaba el proceso de aprendizaje de su pupilo, enseñándole que, nada era absoluto cuando hablaban de ideas, siempre había otro punto de vista válido según las circunstancias, y también, enseñándole lo más básico el arte del kenpo, el milenario arte de combate con katana, fascinándole al chico la marcialidad y el esfuerzo que conllevaba ser un maestro en ello. Cuando llegó a los 20 años, Raiden era un chico sagaz, conocido por muchas partes del Reino, como una joven promesa para el gobierno, e incluso, en Villa Fucsia, ya que su espíritu no era el de un noble, y tenía una gran fascinación por mirar todos los aspectos de la vida de la gente. Su tutor, Thompson, nunca se preocupó demasiado por las andanzas del joven, ya que sabía que era un chico que no pertenecía al mundo de los nobles del cual él era miembro.
A los 21 años, Raiden decidió que era hora de abandonar el Reino. Se había aburrido de ver el mismo paisaje, cortejar a las mismas mujeres, charlar con las mismas personas, necesitaba más. Y los nobles, le proporcionaban una visión del mundo demasiado cerrada. No había olvidado su vida como esclavo, y aunque no le gustase admitirlo, aún guardaba rencor. Mediante unos contactos de su tutor, consiguió contactar con un miembro de la Armada Revolucionaria. Estos últimos estaban extrañados pero maravillados de que un miembro de la nobleza formase parte de sus filas, por lo que le fue permitido unirse a la revolución casi de forma inmediata. Se despidió cordialmente de Thompson, el cual sabía ya que un momento así llegaría con él, y marchó hacia la isla de Baltigo, la sede extraoficial de la Armada. Aunque al principio se desconfiaba de él por su procedencia, poco a poco se fue ganando la confianza y el aprecio de sus compañeros. Además, tuvo la suerte de encontrar a su viejo amigo, aquel que había sido su único amigo en Tequila Wolf, también como un miembro de la revolución. 4 años pasaron desde que se unió, y, sus ideales habían crecido más rebeldes cada día. Ya no se llamaba Raiden Thompson, que era un apellido que no le pertenecía, ahora se llamaba Raiden Daihenkaku, lo cual representaría su meta.
-Alías:
-Sexo: Masculino
-Edad: 25
-Raza: Humano
-Cargo: Cadete Revolucionario
»Facultades:
»Facultades:
- Spoiler:
- -Fuerza +1: Brinda al usuario una fuerza ligeramente superior a la de la medida en un humano normal.
1 Punto de Creación
-Guerrero Nato: Los personajes con esta facultad poseen un amor y capacidad innata para el combate, destacando en este tipo de actuaciones.
1 Punto de Creación
-Profesión:
-Espadachín-
*Velocidad X2: La Velocidad del personaje es superior a la de cualquier persona normal, pudiendo moverse a velocidades algo elevadas.-Espadachín-
*Agilidad X2: La agilidad del personaje es superior a la de cualquier persona normal, pudiendo moverse en diferentes terrenos con gran facilidad.
*Experto en X Arma concreta (Katanas): Tú personaje se ha entrenado con un arma en concreto sacando el máximo provecho posible a esta.
-Akuma No Mi: No tiene
>-Debilidades: No tiene
-Descripción Física:
>-Debilidades: No tiene
-Descripción Física:
- Spoiler:
Mide 1,78 y pesa 67kg; cabello negro azabache, medianamente largo, liso y nunca arreglado, cayéndole usualmente algunos mechones en el rostro. Ojos negros y opacos. De complexión delgada, con su espalda cubierta de cicatrices de heridas debido a azotes de látigos y fustas. Viste con una chaqueta de color negro debajo de una gabardina del mismo color que le llega hasta las rodillas, usualmente con las mangas recogidas. También suele llevar un par de guantes negros cortos, que no cubren los dedos sino solo la palma y el dorso, además de botas militares de cuero y un pantalón color beige. También lleva un cinto de tela medianamente ajustado, en el cual lleva su katana. Tal cinto le permite flexibilidad a la hora de desenvainar.
-Descripción Mental:
Relajado, no suele estresarse demasiado con casi nada, ya que considera que todos los problemas tienen alguna solución. Su hobby es caminar, teniendo como costumbre el pasear por las calles de las ciudades que visita, observando a sus habitantes, la mayoría con vidas pacíficas, que aunque tengan ideales y piensen formas de una vida mejor, no se atreven a realizar acciones consecuentes a ello. No le gusta discutir, ya que piensa que si alguien tiene una idea, esa idea es igual de válida que todas las demás, al no existir una verdad absoluta en aspectos sociales. Repudia la forma de mandato del Gorosei y del Gobierno Mundial, considerando que no son distintos al resto de la población, y que por ello, su mandato no puede ser legítimo. No tiene reparos en acabar con la vida de alguien, aunque suele decir un breve rezo cuando lo hace, ya que no se regocija de ello. Tiene un profundo respeto hacia los ideales de la revolución, y a sus miembros, teniéndolos a todos en alta estima, aunque por su personalidad suela rechazar los trabajos que le son asignados si no considera que valgan la pena. Tiene un apego hacia los cigarros, no como adicción, sino como relajante, fumando uno cuando no se encuentra haciendo nada más interesante. Además, su gusto más peculiar, es la pizza, la cual nunca rechazaría. Cuando lo desea, tiene unos modales impecables, además de un refinado gusto a la hora de catar té, debido a su tiempo en el Reino de Goa.
En cuanto a combates, suele tomarlos de la misma forma que su actitud común: Relajado. Se basa en ataques sencillos con una sola mano sosteniendo su katana, sin aplicar ningún estilo concreto o a veces esgrima, además de mezclarlo con golpes cuerpo a cuerpo. Sin embargo, a la hora de enfrentarse a otro espadachín o usuario de espadas, se lo toma más en serio, utilizando ya movimientos marciales avanzados, agarrando su arma con ambas manos, y su rostro denotando seriedad.
-Meta:
El asesinato de los cinco miembros del Gorōsei, y el derrocamiento del mandato del Gobierno Mundial, para dar paso a una democracia participativa.
-Historia:
No posee recuerdos particulares de dónde y cómo nació, ni de sus padres, ni de su infancia. El recuerdo más antiguo que posee es de su estadía como esclavo obrero en la construcción del puente transmarítimo, Tequila Wolf. Tal recuerdo, es cuando conoció a una persona que posteriormente sería su compañero y amigo, y que en ese momento, también era un esclavo más, aunque, cada uno le dio el nombre al otro, recibiendo él el nombre de Raiden. No contaría con más de 10 años para ese momento, y ya estaba curtido por el tiempo, teniendo una personalidad vacía, tan solo relacionándose con su compañero, y evitando lo posible el llamar la atención. Sin embargo, su cuerpo era débil, enfermándose continuamente, y siendo castigado brutalmente por ello, lo cual dejó imborrables cicatrices en su cuerpo y espíritu. En ese momento, no veía otro estilo de vida que el que llevaba como constructor en ese puente, hasta el día de una breve revuelta que aconteció en el lugar, llevada a cabo por la Armada Revolucionaria. En tal revuelta, Radien se encontró en medio de un tiroteo entre la marina y los revolucionarios, cayendo una bala de cañón cerca del infante, el cual cayó inconsciente. La batalla continuó con él sin enterarse de nada, aunque al final, los revolucionarios fueron forzados a escapar, sin embargo, llevaron a un contado grupo de esclavos consigo, para libertarlos. El pelinegro estaba entre ellos, sin embargo, un barco de la marina interceptó al navío en el cual se desplazaban, siendo este último destrozado. El chico tuvo la suerte de quedar náufrago sobre uno de los escombros del barco.
Cuando despertó, se encontraba en una casa que no sabía cómo describir, acostado en una cama. Las mantas eran completamente limpias, todo el lugar estaba iluminado, y una cosa que le maravilló, fue que en casi todos lados, se encontraba un libro. Vagó por la lujosa vivienda hasta que encontró al dueño, un hombre de unos 50 años, que se encontraba leyendo uno de tantos textos que había en el sitio. Le fue explicado que él, Alastor Thompson, le había encontrado en alta mar en una de sus excursiones de pesca, y que en ese mismo instante, se encontraban en el Reino de Goa, un lugar controlado por una familia del gobierno mundial, y dentro de ella, habitaban varios nobles. Thompson, admitiendo ser un excéntrico, le dijo que le rescató por curiosidad, aunque se comprometió a educarle, deseando ver el resultado que daría al final. A Raiden le costó adaptarse a una vida donde no tenía que realizar todo por su propia cuenta, y a no tener que preocuparse por todo lo que le rodeaba. Durante los años, fue educado con los mejores profesores de Goa, llevando el nombre de Raiden Thompson, desde matemáticos hasta filósofos, y también, instruido por una serie de maestros de esgrima. Thompson por su parte, también cuidaba el proceso de aprendizaje de su pupilo, enseñándole que, nada era absoluto cuando hablaban de ideas, siempre había otro punto de vista válido según las circunstancias, y también, enseñándole lo más básico el arte del kenpo, el milenario arte de combate con katana, fascinándole al chico la marcialidad y el esfuerzo que conllevaba ser un maestro en ello. Cuando llegó a los 20 años, Raiden era un chico sagaz, conocido por muchas partes del Reino, como una joven promesa para el gobierno, e incluso, en Villa Fucsia, ya que su espíritu no era el de un noble, y tenía una gran fascinación por mirar todos los aspectos de la vida de la gente. Su tutor, Thompson, nunca se preocupó demasiado por las andanzas del joven, ya que sabía que era un chico que no pertenecía al mundo de los nobles del cual él era miembro.
A los 21 años, Raiden decidió que era hora de abandonar el Reino. Se había aburrido de ver el mismo paisaje, cortejar a las mismas mujeres, charlar con las mismas personas, necesitaba más. Y los nobles, le proporcionaban una visión del mundo demasiado cerrada. No había olvidado su vida como esclavo, y aunque no le gustase admitirlo, aún guardaba rencor. Mediante unos contactos de su tutor, consiguió contactar con un miembro de la Armada Revolucionaria. Estos últimos estaban extrañados pero maravillados de que un miembro de la nobleza formase parte de sus filas, por lo que le fue permitido unirse a la revolución casi de forma inmediata. Se despidió cordialmente de Thompson, el cual sabía ya que un momento así llegaría con él, y marchó hacia la isla de Baltigo, la sede extraoficial de la Armada. Aunque al principio se desconfiaba de él por su procedencia, poco a poco se fue ganando la confianza y el aprecio de sus compañeros. Además, tuvo la suerte de encontrar a su viejo amigo, aquel que había sido su único amigo en Tequila Wolf, también como un miembro de la revolución. 4 años pasaron desde que se unió, y, sus ideales habían crecido más rebeldes cada día. Ya no se llamaba Raiden Thompson, que era un apellido que no le pertenecía, ahora se llamaba Raiden Daihenkaku, lo cual representaría su meta.
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