[Pasado] Un día antes de todo...

El chico había vuelto a ir a aquella isla, pero en una zona totalmente distinta. Ahora no estaba llena de basura, sino que era un lugar apacible, lleno de vacas, hierba y donde se respiraba un aroma de tranquilidad y paz… algo que le gustaba bastante… sin lugar a dudas, ese era un buen lugar para estar un poco y disfrutar de toda esa tranquilidad. Además, pronto iría a Logue para reunirse con su tripulación y poder ser un verdadero pirata.

- Esto es la gloria… se puede palpar la tranquilidad e incluso el aire… las personas y los animales están tranquilos y la verdad es que esto se transmite incluso a las piedras… esto es lo que de verdad necesitaba para disfrutar un poco del día y no sentir tanta presión. - dijo el chico mientras caminaba por el camino sin asfaltar que separada dos filas de casas, viviendas y edificios en general.

¿Por qué me encontraba yo en esta villa? Ciertamente no lo tenía demasiado claro. El suave aroma del viento, el silencio que solía haber por las calles, sin bucaneros que gritaran borrachos y te lanzaran cuchillos. Todo esto contribuía a que pasara almenos un par de días en esta pequeña isla. Metido en mi mundo de formulas y reacciones químicas, mientras iba recitándolas intentando crear una combinación que hiciera un potente veneno me choqué contra un sujeto, haciendo que probablemente se callera al suelo. Rápidamente disipé todas esas palabras y volví a la realidad.

-Oh, perdone, iba distraido, es lo que tiene ir pensando en un veneno mortal mientras caminas.- Expliqué sonriendo burlonamente, que se creyera eso o no era ya problema suyo. Aunque viendome ese tornillo que adornaba mi cabeza,y mi bata de médico, probablemente no le sería dificil. Estiré mi brazo alargándoselo para ayudarle a levantarse en el caso de que se hubiera caido, y se pudo ver como, al arrugarse levemente la bata y dejar a la vista la carne, habían múltiples cicatrices en una misma zona. Una mala época. Sin embargo, eso era tema aparte.

Tenía que quitarme la fea costumbre de intentar resolver ecuaciones químicas casi imposibles mientras caminaba. Porque, al final, pasaba lo que pasaba.

OFF: ¿Puedo entrar?:3

OFF: Por mi no hay problema y tomo la posición del peatón que atropellas xD

Aunque cuando estuve en Terminal Gray estaba dispuesto a irme, al final me quede con la esperanza de oír algún rumor sobre "la sonrisa" y si tenia suerte o no la tenia, iba a ir a Logue Town, para cazar piratas novatos y conseguir algo de dinero para seguir viajando, mientras caminaba estaba embobado, estaba totalmente despreocupado, estaba, feliz, tal vez porque no estaba pensando en mi eterna venganza, o tal vez el ambiente del lugar era muy relajante, hasta que alguien me tumbo sin querer al parecer, puesto que pidió disculpas, de una forma extraña, al parecer este pensaba en venenos mortales.

Cogí su mano observando varias cicatrices que quedaron a la vista al arrugarse la bata de medico que llevaba este tipo, su aspecto era bastante extraño, no hace falta decir que la característica mas extraña, era un tornillo enorme en la cabeza, me preguntaba si seria decorativo o si de verdad lo tenia incrustado, si era lo segundo realmente seria increíble que haya sobrevivido.

Una vez ya de pie dije.

Oh, no pasa nada, yo también iba pensando en mis cosas, aunque yo no estaba pensando en venenos mortales precisamente.

Le mire de una forma con la que intentaba pedirle una explicación a porque alguien iba por la calle pensando en venenos.

[OFF: Puedes entrar siempre y cuando seas activo y contestes rápido para no tener que esperar media vida.]

El chico de cabellos rubios seguía andando por el camino que había entre las dos filas de edificios. Sin embargo, pasó al lado de estas dos personas, aunque ni siquiera las vio. ¿Hasta donde llegaba el despiste del chico? Ni siquiera él lo sabía, pero claro, también era verdad que iba directamente hacia una taberna con la intención de poder beber un poco y disfrutar un poco más de su estancia en la villa antes de ir a Logue y convertirse, por fin, en un autentico pirata.

- Vaya… espero encontrar una taberna pronto… la verdad es que no me interesa mucho tener que comer al raso… y además,¿Qué comería? Eso, claro está, sin contar la bebida… ufff… todo son problemas… pero bah, no me importa… total, mañana ya será una nueva vida. - dijo casi para si mismo mientras Coday seguía caminando, mirando a ver si encontraba una taberna en la cual meterse.

El sujeto tenía una pinta bastante macabra. Pero yo tampoco era quien para hablar de macabros.. Cogió mi mano,y ante esto yo tiré hacia arriba para levantarlo sin apenas esfuerzo. Al parecer, se había percatado de las cicatrices que recorrían mi brazo. Y esas, solo eran una pequeña parte de tantas que tenía.

- Es lo que tiene ser médico, que no puedes dejar ni un momento de pensar en como ayudar a la humanidad.- Sin duda, mi humor era en ocasiones bastante narcisista. ¿Ayudar a la raza humana creando venenos mortales? A mi modo de entenderlo sí. Era más que necesario aquello.

Escuché una voz que pasó al lado de aquel sujeto y mio. Iba hablando solo sobre que tenía encontrar una taberna. Alcé una ceja mientras me quedaba mirándolo.- Interesante sujeto.- Dije en voz baja mientras me daba un par de vueltas al tornillo, que sonaba como si estuviera algo oxidado. Poco después, quedé callado, observándolos a los dos y analizándolos mentalmente. Sacando un perfil como siempre lo hacía.

Al parecer esta villa estaba más transitada de lo que me esperaba

El tipo hizo un chiste, claro, la ironia era muy divertida, en fin dejando eso de lado mientras estabamos ahi, como no, otra vez estaba coday por estos lugares, me parece que acabariamos siendo compañeros eternos o algo por el estilo, ya que nos hemos encontrado tres veces ya, y como de costumbre ni se percato de que acababa de pasar a mi lado, mientras hablaba el solo, hablando de beber y comer en tabernas, el extraño que me empujo, parecio interesarse por coday, lo que me preocupaba era en que sentido se interesaba.

Hey, Coday.

Dije mientras dejaba atrás al extraño y me acercaba medio corriendo a coday.

El chico de cabellos rubios miró hacia donde provenía la llamada con su nombre y vio, otra vez, a Saphiro a un tipo que parecía muy extraño, se les quedó mirando mientras levantaba su dedo índice y apuntaba al chico del traje de médico. Luego, antes de que llegara su compañero de viajes, que había comenzado a ir hacia él, comentó algo sobre ese extraño personaje.

- ¿Quién es el de la batamanta? - soltó Coday, como si nadie pudiera escucharlo, aunque, claramente, se le había oído perfectamente. Luego, bajó el dedo, esperando una respuesta de cualquiera de las dos personas que allí se encontraban… bueno, a decir verdad, de las dos personas que le interesaban en aquel momento.

El pelinegro saludó al loco que iba hablando solo, buscando una taberna. Yo mientras me acerqué hasta la pared de una casa y me apoyé, reposando la espalda. Miré hacia el cielo y lo ví claro y despejado. Oh dios, que día mas magnífico. Estiré los brazos y solté un bostezo. Hecharme ahora un sueñecito no me vendría mal.. Y así lo hice. Me tumbé en el suelo y cerré los ojos lentamente.A los 10 segundos, ya estaba roncando como un cosaco. El ruido se podía colar en las casas, y era realmente durmiendo, sin embargo, parecía que estaba de lo más tranquilo.

Cuando el rubio estaba hablando sobre mi, yo ya estaba espatarrado, sonriente. Estaba teniendo un sueño en el que me encontraba con varias señoritas en un hotel y jugabamos a..las cartas. Una risita picarona se escapó de mi boca entre los ronquidos. La imagen era realmente..¿Patética? ¿Cómica? Pero desde luego, no era digna de un auténtico doctor, ni mucho menos de un pirata.

Al acercarme a Coday, este en vez de saludar cual persona normal, me pregunto por quien era el tipo de la bata, era un total desconocido para mi, y bueno, al parecer tampoco iba a importar mucho quien fuera, ya que se puso a dormir como un tronco, en el suelo, al lado de la pared de una casa, no me extraña que tenga tantas cicatrices, seguro que le habrían robado mas de un órgano, mientras dormía así tranquilamente por la calle, si es que era uno de sus hábitos.

Mire a Coday con una clara cara de sorpresa y dije.

Pues no tengo ni idea, simplemente tropecé con el, y ya, no le conozco de nada, aunque diría que es un, ex medico que no consigue trabajo, por la bata lo digo, o tal vez alguien muy raro que disfruta durmiendo por las calles, bueno, creo que sera mejor dejarle, en fin ibas hablando de una taberna ¿no?, pues vamos te acompaño, una vez mas.

Acabe diciendo esperando a que este se pusiera a caminar.

Si lo que su acompañante decía era verdad, no estaría de más poder robar alguna parte de su cuerpo, ¿Quién sabe si algún día en el futuro lo necesitaría? Además de que, podría robarle dinero y así tener algo más, así que sacó con su mano diestra uno de los puñales que poseía y se dirigió hacia el chico, intentando hacer el mínimo ruido posible y que nadie viera ni sus intenciones ni el arma punzante que tenía. Claro estaba, no empezó a caminar con Saphiro.

- Podré conseguir algo más de dinero… además, no creo que le importe mucho, viendo que no tiene ni donde dormir y al parecer ni siquiera donde caerse muerto. - dijo el un susurro el chico mientras se acercaba con intenciones no muy buenas a esa persona que estaba allí tirada en el suelo, al parecer, durmiendo.

Una mosca silvestre empezó a moverse alrededor de los tres sujetos, incordiando. Se me acercó entonces, y moviendo sus alas en mi oreja consiguió que diera un salto, asustado por lo que hubiera sido aquello. Entonces me fijé en el rubio, que se acercaba muy silencioso hacia donde yo estaba. Saqué un bisturí del bolsillo.-¿Planeaba robarme o matarme jovencito?-Dije con un tono más serio, levantandome y dándole vueltas al bisturí entre los dedos sin propiciarme ningún corte. No era tonto para darme cuenta que no se estaba acercando hacia mi con intenciones de hecharme limosna ni nada por el estilo.

Clavé mi mirada en él, ahora serio, impasible. Ya había aprendido otra lección, no dormir en plena calel. Porque te pueden robar, matar, o violar, y un pirata violado es la burla de todo el gremio. Seguí dándole vueltas a aquel arma entre mis manos, mientras tomaba una distancia prudencial. No me fiaba ya lo más mínimo de aquel individuo, ni tampoco del que le acompañaba.

-Retirese un metro o me veré obligado a atacar.- Terminé, cortante.

Al dar unos pasos y darme cuenta de que el despistado de coday no me seguía, me di la vuelta y observe como iba a intentar robarle al desconocido con bata, este despertó de repente de su sueño y se levanto pidiendo una explicación de las intenciones que tenia coday, mientras sacaba un extraño bisturí de tres puntas el cual empezó a girar entre sus dedos, parecía que sabia usarlo, luego amenazo a coday diciéndole que se apartara o tendría que atacar, rápidamente me acerque a ellos y dije.

Hey, Hey, Tranquilos, no teneis porque mataros si todavia ni os conoceis, si tan necesitado estas de dinero Coday, trabaja o haz algo para conseguirlo, pero no intentes robarle a alguien que tiene pienta de tener nada de nada.

Aquel tipo que momento antes estaba en el suelo, ahora mismo se encontraba allí, levantado… además, ¿le estaba amenazando? Eso ya era lo máximo que el chico de cabellos rubios podía aguantar, así que metió la mano izquierda donde llevaba los puñales y sacó tres, colocándoselos entre sus dedos. Si quería pelea, la iba a tener… nadie le amenazaba así como así y luego se iba de rositas.

- Ataca valiente, aquí te espero. - dijo con una sonrisa y con los cuatro puñales, tres en la mano izquierda y otro en la diestra, esperando que el tío de la bata empezara el ataque… o esperando que su compañero dijera algo, ya que poco había dicho en ese momento… o por lo menos, nada de interés.

Al sujeto que había ayudado a levantarse no quería pelea. Yo en el primer momento, pero al ver tantos puñales como que no. Así que dí media vuelta al tornillo de mi cabeza, pensando, y guardé el bisturí. Si llevaba tanto puñal era por algo, no creo que fuera por adorno. Terminé de darle la última vuelta al tornillo y pensando con más claridad, mostré una sonrisa zorruna.- Oh vamos. Esos puñales tienen pinta de hacer pupa, y si hieres a un médico quien te cura si ahora mismo apareciera un grupo de 50 marines? Hay que ser práctico amigo.- Sí señores, estaba usando la psicología que había aprendido en la carrera mixta de medicina.

-Además. Si no me equivoco los dos hemos venido a esta isla buscando un remanso de paz y tranquilidad, no hay porque manchar sus bonitas aceras de sangre.- Terminé, sin sonreir ahora, pero mostrando un gesto de más tranquilidad, mientras le mantenia la mirada, esperando una respuesta suya o del otro sujeto. Estiré el cuello haciendo que me crujiera, relajándolo y me mantuve en mi sitio.

¿Atacaría o reflexionaría sobre las palabras que le dije?

Coday estaba decidido a pelear, y probablemente habrian acabado peleando si el medico, o porlomenos asi se hizo llamar el tipo de la bata, intento convencerle de que no pelearan, no creia que funcionase con coday, pero quien sabe, igual lo consigue, me quede mirandoles, no podia hacer nada, hacia tiempo que las pistolas que tenia dejaron de funcionar, asique solo podia observar que ocurria.

Coday guardó todos los puñales que tenía en ambas manos. La verdad es que las palabras de ese médico eran muy ciertos… ¿Qué pasaba si los marines llegaban y le veían peleando? Se buscaría problemas por alguien que se dormía en la calle como si fuera un perro abandonado… bueno, lo importante ahora era seguir buscando una taberna donde poder beber, comer y tranquilizarse un poco.

- A ver… lo que quiero encontrar es una taberna por aquí… ¿sabeis de algún sitio así? No me apetece mucho tener que comer en el suelo, además de que no tengo nada de comer ni de beber… - dijo el chico de cabellos rubios sin ni siquiera mirar a las dos personas que estaban con él. Lo que buscaba era sencillo de encontrar… claro estaba, si tenías buena orientación.

Era cierto el refrán de que las palabras eran el arma más poderosa. Conseguí calmar al luchador, que al parecer comprendió la situación de si vinieran marines. Así que suspiré, con más tranquilidad que antes y me acerqué un poco. El rubio iba buscando una taberna para comer y beber algo. Sinceramente, yo no tenía ni pajolera idea de en donde podría haber una taberna, ya que nunca había pasado por esta isla. Era la primera vez que venía.- Sinceramente yo no lo sé. Es la primera vez que visito la isla, así que estoy un tanto perdido.- Les expliqué, rascándome la cabeza levemente.

-Por lo tanto.. La única opción que nos quedas eres tú.- Dije mirando al sujeto de ojos rojos, que había permanecido callado durante unos momentos. Sonreí levemente y estiré la mano hacia el rubio, y posteriormente hacia el otro sujeto.- Mi nombre es Azazel.- Y sí, podía pasar de estar cabreado a tratar a las personas con una confianza de hace años. Era lo que tenía haber pasado tanto tiempo estudiando formulas químicas y encerrado en una sala, que al final, repercutía.

Al parecer ninguno de los tres era de la ciudad, y por consecuencia nadie sabia donde estaban las tabernas o tiendas por este lugar, una vez se calmo todo, el tipo me miro diciendo que yo era la unica opcion y dandome la mano para saludarme, le estreche la mano y dije.

Losiento, pero yo tampoco se donde se encuentran aqui las cosas, y eso que llevo aqui unos cuantos dias, en fin, sera mejor que caminemos en busca de alguna taberna, porque quedandonos aqui parados no vamos a hacer nada, porcierto soy saphiro.

Al acabar de hablar empece a girar para ver si podia encontrar algun letrero.

Ninguno de los tres que habían allí sabía absolutamente nada sobre la tierra que estaban pisando. ¡Acaso es que no sabían hacer otra cosa que perderse y llegar a un punto por pura casualidad? Fuera como fuera, estaba claro que deberían fijarse en los carteles de las tiendas o preguntar a algún aldeano para saber si podían encontrar un lugar, una taberna, para ser más concretos… Coday no empezaba con muy bien pie, su próxima vida como pirata.

- Bueno… habrá que fijarse en los carteles para ver lo que hacemos… si alguien ve algo, que se lo diga a los demás… y por cierto, no tenéis que venir conmigo si no queréis… nadie os obliga, eso tenedlo claro. - dijo el chico como si hubiera encontrado una cosa fascinante, aunque realmente habían dicho lo que todos sabían de antemano.

OFF: Ante todo perdonad el retraso. He tenido un par de problemas .

¡Magnífico! De los tres que estabamos ahí, ninguno conocíamos bien la isla. Me rasqué el entrecejo después de haberle estrechado la mano al pelinegro y sonreí, con una sonrísa de bobo.-Para guía turísticos estamos.- Bromeé, y escuché la presentanción del hombre de ojos rojos. Saphiro decía llamarse. Volví a llevar las manos a los bolsillos y me fijé en una ardilla autóctona de este área. Nunca antes la había visto. Por un momento pensé en atraparla y revisar sus pequeños organitos internos, pero pronto recordé que estaba andando con ellos y no les sería muy agradable ver una ardilla abierta en canal.

- Ahá. Igualmente si encontraramos algún aldeano podríamos preguntarle, supongo que ellos si que sabrán donde hay una taberna. Además, el sol parece que está apretando.- Acoté, soltando un leve suspiro. Pronto comenzaría a sudar ya que yo era bastante caluroso. Comenzé a andar con ellos mientras me iba hechando hacia atrás las mangas. El día era espléndido, pero no deseaba coger una insolación.

Una pequeña broma por parte de Azazel seguida de un consejo que ya tenia en mente, preguntarle a un aldeano, era tan obvio que si Coday no lo había pensado antes seria una muestra de lo despreocupada que podía llegar a ser una persona, mire al rededor en busca de algún aldeano pero extrañamente no conseguía ver a ninguno, era demasiado raro, este lugar se suponía que era tranquilo y había gente fuera siempre normalmente, o eso es lo que oí en Terminal Gray, mirando a mis dos compañeros dije.

No parece que haya vida en este lugar, fijaos, están la calles vacías, y según tenia entendido este lugar estaba poblado, era tranquilo y feliz, es decir perfecto para pasear y cosas así, pero como dije antes, las calles están vacías, me pregunto si se estarán escondiendo en sus casas.

Después de eso seguí observando el lugar con la esperanza de encontrar a alguien.

Al parecer no había nadie por las calles, pero eso no importaba demasiado, ya que los carteles encima de las tiendas deberían indicarles, como poco, donde se podía encontrar una taberna. Coday empezó a caminar, olvidándose de los otras dos personas que iban con él, como si quisiera ir por libre, pero no lo había hecho por gusto, simplemente era porque no quería perder más el tiempo allí de pie… el tiempo era oro y oro era sinónimo de dinero y el dinero mueve el mundo, por lo que, si pierdes el tiempo, no mueves el mundo.

- Quedaos ahí de pie si queréis, yo me voy a dar una vuelta a ver si veo alguna taberna. Si la veo, tranquilos, estaré en ella, solamente tenéis que buscarme allí. - dijo el chico de cabellos rubios mientras comenzaba a andar, buscando una taberna que, tal vez, nunca encontraría… o tal vez si, eso solamente el destino lo sabía.

Volví a dar una vuelta al tornillo de mi cabeza, suspirando. ¿Debería ir con ellos y beber o hacer otra cosa?. Me quedé inmovil por unos momentos, pensando en qué o no hacer. Finalmente,al ver que el rubio se marchaba en una dirección en busca de alguna taberna yo me giré en la dirección contraria, para salir de la isla.

- Ya nos veremos en otra ocasión amigos, he de irme.- Dije vueltos a ellos mientras alzaba la mano en señal de despedida. Tenía que hacer algo más productivo que beber en una taberna, además, mi mente tampoco soportaba el alcohol en grandes cantidades.Comenzé a andar y mi silueta desapareció en el horizonte. Ya los volvería a ver, el mundo era "pequeño.

OFF: Mi salida del post .

Al parecer ambos pasaban de mi anterior comentario, tampoco le di mas importancia, Coday se fue a buscar tabernas y Azazel se fue, me quede solo, bueno, podía irme con Coday a beber por las tabernas, o irme ya a Logue Town, me convenció la segunda opción, así que tome camino al puerto, donde conseguiría un barco de una u otra forma y me iría a conseguir mas información.

Al parecer, ninguno de los dos chicos había ido con Coday… bueno, ellos se lo perdían. La verdad es que le gustaba beber tranquilamente en una taberna mientras veía a las chicas pasar… no había nada mejor… y con aquellos dos siguiéndole, la verdad es que, tal vez, las chicas no se le acercaran… más que nada por las pintas que tenían, sin contar que ya de por si era difícil que alguna se le acercara. Fuera como fuera, siguió caminando hasta que encontró una taberna.

- Bueno, beberé y miraré por aquí. No creo que haya otra taberna en este pueblo y si la hay, no creo que la encuentre nunca. Luego de beber un poco, me iré… no es plan de quedarme aquí eternamente, además, tengo que esperar en Logue a Desmond. - dijo el chico con cierta determinación. Después de beber y pasar un rato en esa taberna, Coday iría al puerto y cogería algún barco que zarpara hacia Logue Town.

[OFF: Ya se puede cerrar el tema]