[Prologo] - ¿Amigo o Rival?

Sáb Jun 11, 2011 3:24 am

El recuerdo de una vieja amistad, se aproximaba a las tierras del pueblo de Shimotsuki. En la cual, la fría, sádica pero talentosa Juri Han, se encontraba dando una especie de paseo hacia una taberna nocturna. En efecto quería pasar un "buen" tiempo. Tantas luchas de por si, podrían mantenerla cansada y lo mejor sería balancear las peleas y los llamados "días libres" para mejor rendimiento de sus habilidades. Aquella maligna presencia pateó la puerta del lugar, causando por ende, que aquella sea despegada de manera brutal, causando un enorme, fuerte y molesto sonido el cual llamó la atención de todos los que se encontraban dentro de la taberna, mirando a la chica con un cierto desprecio, pero no obstante nadie levantó la voz, nadie pudo desafiar a la chica como se lo esperaban, así que solo con aquella mirada de desprecio se conformaban.

- ¡Malditas Basuras! - Vociferó fuerte y claro para que su voz sobresaliera en aquella taberna para que además se escuche en toda la taberna y le presten atención cada uno. - ¿Algún problema con mi visita? - Agregó en un tono agresivo al igual que el comentario anterior.

Mientras, que luego de aquél escándalo empezó a caminar hacia una de las mesas del local, sin color, simplemente con una apariencia de madera mal gastada, hasta con agujeros... Porque no decir que era una mesa asquerosa y puesta en ese lugar para que cualquiera pueda "disfrutar" de esa cómoda combinación. ¿Iba a ordenar algo?... Al parecer no, solo se encontraba enmudecida en aquél lugar efectuando las normales acciones de un humano, ver, respirar, escuchar, pensar, no se sabría cual era la más relevante en su mente en ese instante, pero de algo si se podría estar seguro, de que un hecho interesante habría de pasar, con alguien dentro de la taberna o alguien que este fuera de la taberna, todo simplemente era cuestión de tener paciencia y esperar, todo con aquél rostro sádico y con aquella larga sonrisa, que muchos podrían considerar maniática.

Dom Jun 12, 2011 12:33 pm

Un día como cualquier otro era el que se dibujaba en la apacible isla de nombre Shimotsuki, donde varios espadachines de renombre habían comenzado con sus andanzas, siendo entrenados en los dojos de la misma o perfeccionando su arte junto a los maestros del lugar. En una de las pocas tabernas que se erigían en aquella ciudad, un peli-azulado soñador se encontraba bebiendo un poco de ron, descansando un poco de su continuo entrenamiento y preparado para irse de la isla al anochecer, en algún barco turístico o de mercancías, como acostumbraba a hacer.

Pero el bullicio del local fue quebrado por la firme y fuerte voz de una mujer, haciendo que el muchacho levantase su rostro y observase a través de sus gafas a la muchacha que había llegado al establecimiento, la cual parecía ser bastante ruda y temeraria, teniendo en cuenta que había retado a los ebrios que frecuentaban aquel lugar, y sin siquiera pensárselo dos veces.

Luego, pudo ver como está se sentaba en una mesa vacía, muy cercana a la solitaria mesa donde el se encontraba, por lo cual tomo la botella de ron y se acercó, sentándose del otro lado de la mesa y depositando la botella en la misma, para luego empujarla en dirección a la joven, al tiempo que acomodaba su capa hacía atrás de si, dibujando en sus labios una sonrisa enérgica, la cual fue tapada de la vista por el vaso de ron que se llevo a la boca, bebiendo de este para luego exclamar. - ¡Bebe un poco!, Yo invito, señorita. - Expreso con una voz algo enérgica y alegre, teniendo en cuenta que el alcohol le estaba afectando, aunque claro, tan solo un poco, lo cual lo hacía mas sociable de lo normal, además de más alegre. Ahora solo restaba esperar a ver cual sería la reacción de la muchacha, ya que por como se había mostrado anteriormente, de seguro le partiría la botella en la cabeza o algo por el estilo.

Mar Jun 14, 2011 3:57 am

La chica andaba en total soledad, claro, todas las personas le rechazaban por aquella actitud, por algo quería destrozar a quien se le pase por el frente, era una vida relativamente "mala" para cualquiera que pudiese escuchar su historia, pero ¿a quién podría decirle su historia? la verdad su actitud cerraría cualquier posibilidad de que pueda decirle la misma a cualquier persona, o al menos eso ella pensaba, con aquellos ojos sin amistad y solitarios andaba observando simplemente a un punto vacío con su cabeza un poco alzada, ya que precisamente lo que veía la chica era el tétrico techo de aquella taberna nocturna. Dentro de poco tiempo alguien iba a realizar acto de presencia, y en efecto, se había aparecido un joven de pelo azul, el cual vestía como si de un super héroe se tratase. Este se presentó mostrando una personalidad algo amigable, cosa que forzó a mirar de reojo al mismo, levantando el ceño de sus cejas mientras le miraba con cual desprecio típico ella daba a mostrar. Pero el mismo al parecer le brindaba una botella a la par que el mismo probaba la bebida para indicar que no estaba envenenada o algo por el estilo.

La chica solo pudo dar a conocer una pequeña sonrisa, mientras que con un rostro "amigable" tomó la botella al instante, para que en el momento en el cual el borracho hombre andaba bebiendo su copa realizar tan cual movimiento que destrozó aquella botella sobre la cabeza del peli-azulado, dejando que aquél delicado líquido recorra toda su piel hasta derramarse por completo, todo mientras la parte sobrante y punti-agúda del mismo objeto permanecía en su brazo derecho, aguardando alguna que otra acción.

- ¡Eso te mereces por querer emborracharme! - Dijo con una voz fuerte, mientras daba una patada ascendente a la mesa para que la misma sea partida por la mitad por aquella fuerza extraordinaria de la chica. - A la próxima... ¡Te mato! - Agregó para finalizar sus comentarios por esa ocasión, dando así, un chance para que el borracho pueda expresarse o realizar algún movimiento que para lo cual, la peli-negra andaba preparada.

Mar Jun 14, 2011 12:19 pm

Al parecer la muchacha no era tan mala como pensaba, ya que había aceptado la bebida y hasta le había sonreído, pero al momento en el que volvió a llevar aquella deliciosa bebida a sus labios, sintió como algo se partía en su cabeza, nada grave ni doloroso, ya que era una simple botella y su cabeza aguantaba más que ello, pero, ¿Por que le habían atacado? Al levantar su mirada pudo ver que se trataba de la muchacha misma, la cual de un movimiento partió la mesa y se levanto, diciéndole unas pocas palabras que dejaron en un estado de shock pasajero al joven peli-azulado, ya que está le acusaba de querer emborracharla, y además, de que si lo intentaba de nuevo lo mataría.

Esas palabras hicieron que sonriera algo apenado, sacudiendo la cabeza para quitarse los fragmentos del cristal desperdigados entre sus cabellos, para luego tomar la punta de su capa y pasársela por la cara, limpiándose así el licor que se había vertido en su rostro, observando con algo de nostalgia los pedazos de la botella de tan delicioso Ron, para luego observar a la joven y hacer una leve reverencia, al tiempo que le decía. - Lo siento, no era mi intención incomodarte, ni emborracharte, solo quería conversar con alguien, pero no te preocupes... Ya no te molestaré. - Expresó sin dejar de sonreír, para luego levantarse y rodear los escombros de la mesa, llegando a la barra y dándole al camarero una bolsita de dinero, con la cual dejaba en claro que pagaría la destrucción de la mesa y el escándalo, para luego tomar una botella de la misma barra y destaparle el corcho con sus dientes, comenzando así a caminar hacía la salida, bebiendo de la botella y pensando a donde iría ahora para entretenerse un rato.

Mar Jun 14, 2011 3:32 pm

Aquella situación de agresividad iba a terminar realmente mal, pues el chico se sintió aparentemente mal, cosa que nadie había mostrado ante la chica, ya que pocas personas podrían demostrarle un sentimiento un tanto sincero como ese, la chica no pudo creer que andaba pasando, solo se podía quedar muda por ese instante, vio el modo de disculpas de aquél muchacho mientras que luego de la acción ya mencionada con anterioridad, el joven se encaminó hacia la parte principal del local, para pagar hasta por los daños que ella había ocasionado, sin duda eso le causó cierta culpa en su corazón, cosa que jamás había sentido en su vida. Luego el mismo se dispuso a marcharse, más ella le observaba, hasta que decidió seguir sus pasos y alcanzarlo en su ruta.

- Oe... Yo... - Dijo entre labios, pues era la primera disculpa que iba a realzar desde cuando nació. - Disculpa si mal interpreté todo... - Comentó agregando a su comentario anterior, para dejar claro que lo que pasó, fue simplemente un error.

Fue caminando a su lado a la par que mencionaba aquellas palabras, las personas que andaban en la barra se mostraban verdaderamente sorprendidas por aquella acción de amabilidad de la chica. Aunque posiblemente no le creerían pero ella sabía que el chico era una persona muy diferente a las demás que había conocido en toda su vida, y de por sí, quizá le podría llegar a creer y a darle las disculpas que andaba buscando. Después de todo... Siempre había que aprender de los errores y ella había aprendido que no todo el mundo la rechaza como persona humana o mejor dicho común.

Mar Jun 14, 2011 3:45 pm

El muchacho continuaba con su caminar hacía fuera del establecimiento, tomando aún de la botella que había comprado y deleitándose con tan sabroso licor, pero de pronto algo hizo que se parase en seco, en la puerta misma del local, ya que la joven parecía haberse sentido mal ante lo sucedido y se había disculpado con el, algo que no se esperaba, pero que tampoco era una cosa como para desmayarse o sorprenderse de sobre manera, simplemente lo tomo desprevenido, haciendo que girase su cabeza en dirección a esta y tras unos segundos de pensamiento en su cerebro, asimilando la situación, sonrió amablemente y le dijo. - No te preocupes, no hay que perdonar. - Finalizó sonriendo con aún más energía, mientras tendía nuevamente la botella a la muchacha, esperando que esta ves no se la partiese en la cabeza, aunque claro, nada podría asegurar el que no lo hiciese.

Al parecer, la muchacha no era realmente "mala", si no solitaria, y de eso sabía bien, ya que con sus constantes viajes no tenía muchos amigos o personas con las que conversar, sin ser los aprendices de los dojos y demás, aunque con esa clase de gente se comunicaba a espadazos más que nada. Ahora solo restaba ver la reacción de la muchacha, ya que de ello dependía el que se quedase a conversar con ella o que se fuese nuevamente, aunque bueno, el destino ya estaba escrito, por lo que pasase lo que pasase lo tomaría bien.

Jue Jun 16, 2011 3:58 am

La chica se sentía avergonzada, solo porque no solía disculparse como lo había hecho, pero en verdad, dudaba que lo volvería a hacer otra vez en su vida ya que en ese momento solo quería explotar y mandar a la mierda a todo el que se le pase por el lado, el joven resultó ser verdaderamente amable ya que a pesar de lo que le hizo, le seguía brindando otra botella totalmente ajeno a lo que podría pasar, claro esta vez estaba confianza en ella nuevamente y pues... No tendría porque realizar lo mismo nuevamente y ella en verdad no andaba para andar de niña jugueteando por lugares sin nada que hacer, pero en verdad. ¿Será eso cierto de que no iba a pasar lo mismo?, pues la verdad se tendría que ver, por lo visto la chica simplemente tomó la botella, no mostrando sonrisa ni nada, solo su rostro desolado y extrañamente "triste", seguido de aquella expresión se denotó una sonrisa maquiavélica entre sus dientes y rostro, mientras que sujetó fuerte la botella para moverla hacia la dirección de la cabeza del sujeto, pero unos segundos antes de que impacte a tal simplemente se escuchó...

- ¡Bom!... ¿Pensabas que iba a golpearte otra vez? - Comentó en un tono sarcástico pero afirmativo para luego empezar a tomar de la botella, aquél líquido delicioso de lo que eran las bebidas con cierto grados de Alcohol. - Me decepcionas - Agregó dicho comentario con autoridad y burla, tratando de provocar al sujeto a simplemente iniciar una conversación. La chica continuaba caminando con el chico hacia las afueras de la taberna, más se detuvo al salir de aquél lugar tétrico y lúgubre. Para observar al Peli-Azulado, por si se le ocurría preguntarle algo o simplemente pedir su botella devuelta.

Jue Jun 16, 2011 10:46 am

La muchacha tomo la botella como este esperaba, más su semblante no era el que se imaginaba el peli-azulado, ya que parecía estar seria y algo triste, aunque rápidamente eso cambio, ya que la botella nuevamente se dirigía hacía la cabeza del espadachín, aunque está vez se había detenido en seco a escasos centímetros de su rostro, por lo que se dió cuenta de que la muchacha se estaba divirtiendo un poco, algo que le hizo sonreír nuevamente, teniendo en cuenta que la joven había sonreído y eso era lo que buscaba el peli-azulado, aunque fuese una sonrisa extraña y perturbadora.

Entonces, la muchacha se burló del espadachín, algo que hizo que riese por lo bajo, ya que a fin de cuentas estaba haciéndola hablar con el, o sea, estaban entablando una conversación, por más efímera y breve que fuese, por lo cual el peli-azulado iba a seguir la charla. - Ya creía que iba a perderse otra botella de licor... Me llamo Sieghart, ¿Y tú? - Preguntó acompañándola fuera del establecimiento, caminando a paso lento y tardío para que esta lo siguiese, dirigiéndose a ningún lugar en particular, ya que no tenía prácticamente nada para hacer en esos momentos, más que acompañar a la muchacha de nombre aún desconocido.

Vie Jun 17, 2011 11:45 am

Como era de esperarse, el chico había pensado que la chica le iba a partir la botella nuevamente en la cabeza, pues solo era eso de esperarse ya que los momentos agradables estaban pasando como si fueran típicos al menos se empezaban a caer bien entre ambos o al menos eso pensaba la peli negra viendo la sonrisa de aquél sujeto, pero no era una razón realmente válida para pensar aquello, más por igual, no le importaba mucho en ese aspecto, llevarse bien con otra persona era bueno y más con alguien amigable como el chico de pelo azul y agradable personalidad.

- Juri Han "Piernas de Hierro" - Dijo con tono orgulloso y con aquella sonrisa que resaltaba la cualidad ya dicha. Dejando de igual manera que aquellos orbes color rosas, de lo que representaban sus ojos, sean apreciados por el chico, solo quería que no olvidara su rostro, pues ese era uno de sus sueños, el llegar a ser reconocida por todo el mundo pirata.

Sencilla frase mencionada por la chica, dejando al claro su nombre y así mismo su alias de peleadora. Con esto aquél chico tendría que darse cuenta de que era una peleadora, a lo mejor pirata, marine o porque no... Cazarecompensas. La chica se cruzó de brazos mientras continuaba su lenta pasada por la taberna, para salir de la misma y pues, cuando estaban empezando a salir de la taberna, todo oscuro como toda normalidad, algunas que otras luces encendidas para relucir las calles de Shimotsuki y, además aquél gran globo aparentemente plateado colocado en el cielo, el cual brillaba intensamente para alumbrar de la misma manera todo el globo terráqueo desde ese punto, claro está. Solo faltaba esperar las siguientes palabras del chico, no tendrían que tardar tanto, pues ya estaba empezando la hora de cada quien partir por sus distintos lugares.

Vie Jun 17, 2011 3:14 pm

El muchacho puso pie fuera de la taberna y extendió ambos brazos hacía arriba, desperezándose mientras estiraba todo su cuerpo hasta quedar en puntas de pie, para luego retomar la compostura y bostezar con bastante estridencia, algo que de seguro captaría la atención de los nocturnos transeúntes. La luna brillaba como pocas veces, iluminando las inmediaciones de una tonalidad plateada y brillante, resaltando en el estrellado firmamento como la más notoria estrella de todas, aunque fuese un satélite de la tierra, cosa que solo los más grandes astrónomos conocían.

Entonces, la voz de la muchacha quebró el silencio de la noche, presentándose a si misma como Juri Han, también haciendo alusión a su apodo, "Pierna de hierro", lo cual dejaba en claro que era una luchadora, y por ende, que no era una civil más, ya que rara ves se veían civiles con apodos de tal calibre, si no que se veía a piratas, caza recompensas, o hasta marines; con dichos apodos, pero para llamarse de esa manera sus piernas deberían ser la base de su fuerza, por lo que debía ser bastante duro que te golpeasen con una de ellas.

Sin perder más tiempo, el muchacho le sonrió de lado, con una sonrisa temeraria y enérgica, al tiempo que sus labios se movían y exclamaba con suma emoción. - Mi nombre es Sieghart Akechi, no tengo un apodo, pero recuerda mi rostro y mi nombre, ¡Ya que serán conocidos hasta en el cielo mismo! - Sentenció elevando su brazo diestro y apuntando al cielo con su dedo índice, haciendo que al cambiar de posición sus gafas relampagueasen con el brillo de la luna chocando contra estás, al mismo tiempo que el viento hacía que su capa comenzase a ondear, flameando como las fieras llamas del sol, dejando así que la escena pareciese sacada de un manga de héroes y acción.

Momentos después, el brazo del joven volvió a bajar, para así meter ambas manos en sus bolsillos y decirle. - Fue un placer conocerte, Juri Han, espero nos veamos nuevamente... Por ahora, es momento de partir. - Expreso sonriendo y haciendo una leve reverencia hacía la muchacha, para luego darse la vuelta y comenzar a caminar en dirección al puerto, saludando con su mano en alto desde la distancia mientras se perdía entre las lejanas callejuelas, esperando que algún día se volviesen a encontrar.

Sáb Jun 18, 2011 6:07 pm

La chica se había presentado cordialmente y pues, su compañero igualmente, pero algo ocurrió en el instante en el que ella terminó de pronunciar su nombre y apodo, el chico le sonrió a la par que iniciaba nuevamente a decir su nombre, pero esta vez en otro tono, algo más extraño y energético, al ver la pose del sujeto, la chica no hizo más que poner un rostro extraño, con una gran gota cayendo por la cabeza de la misma, era claro... Ese espectáculo fue innecesario, además de que él ya había dicho su nombre anteriormente.

- Si si... Como tu digas, Super-Man - Dijo burlescamente acompañando dicho comentario con una gran sonrisa.

Luego al parecer ya era la hora de partir, el peli-azulado inició la despedida, fue muy cordial de su parte el hacer aquella despedida. Más la chica simplemente lo miraba fijamente, hasta que el mismo concluyó su despedida para darse la vuelta e iniciar su caminata fuera de aquellas calles a la vista. Juri no pronunció ni una sola palabra, tan solo se dio la vuelta igualmente, para luego empezar a caminar hacia otra dirección. ¿Cuál era su plan? nadie lo sabía, pero de algo si se estaba seguro, que ese sujeto y ella, se volverían a ver algún otro día, no muy lejano, así finaliza una gran aparente amistad entre Sieghart el peli-azulado y Juri Han piernas de hierro.

[Disculpen el post algo corto, pero andaba de volada]

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